Flipped Classroom

1. ¿Qué es el Flipped Classroom?

Los profesores Bergmann y Sams se dieron cuenta a comienzos de 2000, que los vídeos que grababan y distribuían a los estudiantes que frecuentemente perdían algunas clases por enfermedad, les permitían luego en el aula centrar más su atención en las necesidades individuales de aprendizaje de cada estudiante. Estaba naciendo el Flipped Classroom (FC). La propuesta invierte los roles en el aula, el estudiante desempeña un rol principal en su proceso de aprendizaje y el docente actúa como guía (Bergmann y Sams, 2012). 

Desde una perspectiva práctica, El FC es un enfoque pedagógico que propone trabajar los procesos instructivos sencillos (observar, memorizar, resumir) fuera del aula y utiliza el tiempo de clase para procesos cognitivos más complejos que requieren la ayuda entre iguales o la ayuda del docente (razonar, resolver, argumentar…) (Castilla et al., 2015). Pero debemos tener en cuenta que con la acción “invertir” no nos referimos solamente a que el aprendiz consulte la teoría previamente, sino que se hace referencia  a un enfoque integral de aprendizaje (Tourón y Santiago, 2015).

https://www.youtube.com/watch?v=Xx3AVjuzVdc 

Por lo tanto, se trabajan en casa los elementos teóricos o pasivos a través de vídeos y materiales sencillos para llegar a la clase con una base de conocimiento que permite al profesor realizar en el aula actividades de práctica, resolución de problemas o análisis de conocimientos. Cuando los docentes ponen contenidos en línea, el tiempo de clase se libera para que se pueda facilitar la participación de los estudiantes en un aprendizaje activo y acompañado por el docente.

De este modo, el alumno primero prepara sus lecciones en casa con la observación y síntesis de la información mediante vídeos o textos, y pone posteriormente en práctica lo aprendido en el aula realizando actividades de profundización o proyectos en grupo, con ayuda de su profesor. Es decir, invertimos el sistema tradicional, pues el alumno “aprende las lecciones” en casa cuando está solo y realiza “los deberes” en clase con apoyo del profesor, pudiendo así consultar sus dudas y afianzar sus conocimientos.

El objetivo es mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje adaptándose a las necesidades de cada alumno, al permitir al alumno consultar la información con ayuda de las tecnologías tantas veces como necesite, sin depender del ritmo de aprendizaje de sus compañeros y, luego, disponiendo de la cercanía del docente en clase a la hora de realizar las actividades complejas. Y desde este mismo punto de vista tecnológico, se puede añadir que es un enfoque que facilita acceder al contenido de forma ubicua, en cualquier lugar o momento, prescindiendo de la figura del docente como transmisor de contenidos (Vidal et al., 2016).

Finalmente, podemos realizar una sencilla comparativa de un modelo tradicional con un modelo invertido. Una clase normal se distribuye en 5-10 minutos de repaso o corrección de ejercicios, 30-40 min de explicación, y 5-10 min de aplicación práctica. En una clase invertida se inicia con 5-10 min para comprobar lo que se sabe y el resto del tiempo es para la aplicación práctica. Finalmente, añadir que existen evidencias que permiten afirmar que el FP implica una mejora del rendimiento académico de los estudiantes (Sola et al., 2019).

1.1. El papel del docente y la tecnología

Como adelantamos en el punto anterior, el modelo se basa en aprovechar las tecnologías digitales para distribuir contenidos y tareas escolares fuera del aula y combinar con métodos constructivistas en el aula, que aumenten la implicación de los alumnos con su aprendizaje y mejoren su comprensión conceptual. El tiempo liberado por la información adquirida en casa debe facilitar la participación de los estudiantes en el aula a través de preguntas, discusiones y actividades aplicadas que fomentan la exploración, la articulación y aplicación de ideas. Por lo tanto, la propuesta invierte los roles en el aula, el estudiante desempeña un rol principal en su proceso de aprendizaje y el docente actúa como guía (Bergmann y Sams, 2012). 

1.- El profesor fuera del aula:

• Diseña el proceso completo
• Planea actividades que se realizarán fuera del aula: hacer una lectura, ver un video o cumplimentar un cuestionario
• Diseña la evaluación

2.- El profesor en el aula:

• Guía y facilita los procesos de aprendizaje
• Retroalimenta el proceso de los alumnos en su aprendizaje
• Selecciona e integra tecnología para el aprendizaje activo
• Evalúa

De esta manera se combina de manera sencilla y eficaz la tecnología con el aprendizaje tanto síncrono como asíncrono. Este modelo se centra en el aprendizaje de los estudiantes como motor de acción.

Para ello requiere herramientas para la gestión de la clase (gestión de aula, sistemas de clasificación) y herramientas de aprendizaje (herramientas de estudio, portafolios digitales o sistemas de gestión de aprendizaje).

2. Ventajas e inconvenientes del FC

Ventajas

1. Facilita los distintos ritmos de los alumnos, pues en su casa pueden consultar el material en el momento que quieren, al ritmo que prefieran y tantas veces como consideren necesario.
2. Permite a los docentes dedicar más tiempo a la atención individual (diversidad). Durante el tiempo de clase los alumnos tienen al profesor disponible, liberado de tener que dar la clase y donde puede asistirles y guiarles.
3. Permite a los alumnos ser más autónomos y protagonistas de su aprendizaje.
4. Proporciona al alumnado la posibilidad de volver a acceder a los mejores contenidos generados o facilitados por sus profesores.
5. Hay más tiempo de actividad en clase y se pueden hacer más tipos de actividades y dinámicas más activas.
6. Permite crear un ambiente de aprendizaje colaborativo en el aula.
7. Involucra a las familias desde el inicio del proceso de aprendizaje.
8. Se evitaba la frustración de los estudiantes que en el sistema tradicional no realizaban la tareas de casa cuando tenían dificultades (y no tenían a quién preguntar).

Prevenir inconvenientes

Nombremos también algunas dificultades que surgen habitualmente en este proceso y que conviene prevenir:

1. Grabar los vídeos lleva más tiempo del que parece. Además de diseñarlo y grabarlo, también hay que colgarlo en Internet y dar un acceso sencillo a los alumnos. Planifícate y empieza utilizándolo en un tema para medirte.
2. No se trata de ponerse a crear todos los vídeos de golpe. Es conveniente aprovechar los que otros hicieron ya antes y pusieron a tu disposición en Youtube, Vimeo o TikTok. Y ya que estamos, haz tú lo mismo cuando los tengas.
3. A algunos alumnos no les gustan los cambios en la manera de aprender. No te sorprendas y sobre todo no te desanimes, pues todo cambio requiere un esfuerzo.
4. El tiempo de trabajo síncrono (en clase o por videoconferencia) es más difícil de planificar, pues depende mucho del grupo. Ten siempre actividades en la reserva para gestionar este tiempo y poder ofrecerlas si fuera necesario.

2.1. El FC en las distintas etapas

• En Educación Infantil (0-6 años), la aplicación es más compleja, pero no imposible. Hay ciertos contenidos que se adaptan mejor a esta metodología, como ciertos conceptos matemáticos, el conocimiento del medio o el proceso de lectoescritura. Pero en esta etapa es vital el apoyo de la familia, ya que serán los padres los que pongan las tecnologías al servicio del aprendizaje de los hijos.
• En Educación Primaria (6-12 años) es clave motivar a los alumnos para mantenerlos enganchados. Esta metodología ayuda a los alumnos a motivarlos, a aprender a trabajar en equipo, a convivir en el aula y a crear un vínculo afectivo entre el centro, el alumno y la familia.
• La Educación Secundaria y Bachillerato (12-18 años) es una etapa complicada emocionalmente para muchos jóvenes. Las tecnologías digitales pueden ser un instrumento que les atraiga y les guste. Les permite gestionar su ritmo de aprendizaje (sobre todo a los más maduros) y son un incentivo para aprender.

3. Componiendo un Flipped Classroom

Vamos a planificar los pasos para crear nuestro Flipped Classroom

3.1. Planificación de la docencia

Delimitar los contenidos a trabajar. Se elige el tema y el objetivo que se quiere alcanzar, las competencias a desarrollar.

Se consideran los recursos de los que disponemos y las particularidades de nuestro grupo.

Se establecen tareas, ejercicios y actividades, estructurando tiempos y espacios y haciendo hincapié en la tarea de los alumnos antes, durante y después de las clases presenciales. Se debe secuenciar el trabajo fuera del aula. Se deben diseñar bien las sesiones de aula, teniendo en cuenta el trabajo realizado fuera.

Se diseña un soporte para el trabajo en casa de los estudiantes. Puede ser la plataforma de aprendizaje (Classroom, Moodle) o puede ser una herramienta web (Site, Blog) o incluso un espacio de almacenamiento (Drive, Dropbox). Recomendamos Calendar, porque permite agendar las tareas y organizar la actividad.

Se debe tener en cuenta que las actividades que requieren procesos cognitivos de orden inferior deben ser practicadas fuera del aula, en trabajo autónomo del alumno, apoyado en tecnologías digitales.

3.2. Digitalizando el material

Para aportar los contenidos que el alumno trabaja en su casa, el profesor debe ser creador de contenido propio o filtrador de contenido de la red. Lo habitual es distribuir vídeos y material multimedia que desarrollen parte del contenido que debiera tratarse en clase. Para ello se requiere:

• Crear un espacio donde alojar y ordenar el material (Youtube, Drive, etc.).
• Seleccionar vídeos y recursos multimedia. Pueden ser creados por el docente, pero también pueden ser recursos libres en Internet. No es necesario que el docente cree todo el material.
• Utilizar herramientas interactivas para asegurar que ese material se usa y se aprovecha (Edpuzzle). Para asegurar que el alumno accede y aprovecha los vídeos propuestos por el docente se pueden integrar preguntas en el vídeo y, a partir de ahí, determinar qué grado de conocimiento se ha adquirido. Eso permitirá replantear la sesión de aula, adaptándola. Tutoriales en este canal. 
• También se pueden facilitar documentos en línea, a través de Slideshare (presentaciones), Scribd (libros) o PDF. Artículos de revistas y periódicos en línea también pueden ser ayuda.

Estos materiales deben ser sencillos y accesibles y requerir algún tipo de interacción al alumno. Se trata de buscar un equilibrio de trabajo fuera del aula y trabajo dentro del aula.

En un apartado final* se cuenta más detalladamente este apartado digital y los diferentes elementos que podemos incorporar en el Flipped Classroom.

3.3. Actividades para el aula

En las sesiones de aula es recomendable tener las actividades bien planificadas pues dependen en gran medida de la reacción del grupo.

Por ello se recomienda empezar con una pequeña evaluación que sirva para revisar contenidos y conocer hasta qué punto se asumió el trabajo previo del alumno. Herramientas para la evaluación inicial pueden ser Kahoot o Socrative.

Es aconsejable reservar a continuación un espacio para solucionar las dudas derivadas del trabajo en la casa. Es habitual que este parte de dudas dure más de lo que estás acostumbrado, al menos en las primeras ocasiones, pero ello genera una mayor tranquilidad en los alumnos y va a permitir un mayor contacto directo con los estudiantes.

Una vez superados estos dos importantes elementos de toma de contacto y resolución de dudas, es momento de trabajar con el grupo. Es conveniente proponer modos de trabajo adecuados a lo que queramos conseguir en cada sesión, incorporando metodologías activas y dinámicas participativas. Hay que sacar el máximo partido a la cercanía del docente y al tiempo “extra” conseguido por el trabajo previo en casa.

En este momento encajan perfectamente propuestas de trabajo por proyectos en pequeños grupos, aprendizaje por retos, actividades de debate, estudio de casos prácticos, resolución de problemas complejos, exposiciones de alumnos o de grupos, dinámicas de discusión o argumentación, y trabajos en colaboración. Es probable que uno de los secretos de éxito esté en la capacidad de proponer tareas variadas durante las clases.

Esta versatilidad está apoyada en la tecnología digital, que permite realizar tareas de diversos tipos permitiendo al profesor estar al tanto de manera inmediata del progreso de los grupos o de los alumnos, interactuar con ellos y trabajar de manera distribuida y eficaz.

Este momento también es el tiempo para la observación, la recolección de evidencias de aprendizaje y la evaluación formativa continuada

https://www.youtube.com/watch?v=C_9E1h-k3To

4. Buenas prácticas (ejemplos)

• Clintondale High School.

• Página web de Clintondale High School
• Canal de Youtube con lecciones
• Reportaje sobre la experiencia del centro (en inglés, con transcripción)
• Reportaje de The New York Times sobre Clintondale y la flipped classroom (en inglés)

• Pablo Cañas (Educación Física ESO)

• Ejemplos de vídeos

• Interacción de un vídeo: https://edpuzzle.com/media/5ee78ac154dfbb3f3cfdfd0d
• Presentación en un vídeo: 

5. Herramientas y pasos para hacer un FC

6. Referencias bibliográficas

Bergmann, J. y Sams, A. (2012). Flip your classroom: Reach every student in every class every day. Eugene, OR: International Society for Technology in Education.

Castilla, G., Alriols, J., Romana, M. y Escribano, J. J. (2015). Resultados del estudio experimental de flipped learning en el ámbito de la enseñanza de matemáticas en ingeniería. En M. A. Ruiz Rosillo (Coord.), Actas de las XII Jornadas Internacionales de Innovación Universitaria (pp. 774-782). Madrid: Universidad Europea de Madrid.

Sola Martínez, T., Aznar Díaz, I., Romero Rodríguez, J. M., & Rodríguez-García, A. M. (2019). Eficacia del método Flipped Classroom en la Universidad: Meta-análisis de la producción científica de impacto. Revista Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, 17(1), 25-38 https://doi.org/10.15366/reice2019.17.1.002

Tourón, J. y Santiago, R. (2015). El modelo flipped learning y el desarrollo del talento en la escuela. Revista de Educación, 368, 196-231. https://doi.org/10.4438/1988-592X-RE-2015-368-288

Vidal, M., Rivera, N., Nolla, N., Morales, I. R. y Vialart, M. N. (2016). Aula invertida, nueva estrategia didáctica. Educación Médica Superior, 30(3), 1-12.

7. Créditos

Autores del curso:

Grupo de Investigación Educación Digital e Innovación (EDI)

Universidad Autónoma de Madrid (UAM)

Melchor Gómez García

Moussa Boumadan Hamed

Créditos

Área de Formación en Línea y Competencia Digital Educativa del INTEF
Este curso y sus materiales se distribuyen con licencia Creative Commons 4.0

Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado
Ministerio de Educación y Formación Profesional