La nueva concepción del espacio físico de la biblioteca como un espacio social y de creación encaja perfectamente con el análisis del informe Horizon Educación Primaria y Secundaria 2016, que describe las tecnologías emergentes llamadas a tener un impacto significativo en la enseñanza en los próximos años (2016-2020).

En él se señala como tendencia a medio plazo “el aprendizaje colaborativo, en el que los estudiantes o docentes trabajan juntos en actividades por pareja o en grupo y que está basado en la perspectiva de que el aprendizaje es el resultado de una construcción social”. Y también aparecen como una de las tecnologías a desarrollar, ya a corto plazo, los makerspaces.
Makerspaces y bibliolabs
Los makerspaces, espacios maker o talleres creativos son lugares en los que se pone a disposición de la comunidad las herramientas necesarias para desarrollar proyectos. Surgen a partir de la eclosión de la cultura maker, que propugna la creación de objetos tangibles utilizando las nuevas tecnologías y que ha evolucionado desde el concepto DIY (Do It Yourself, hazlo tú mismo) al DIWO (Do It With Others, hazlo con otros). Se trata de pasar del pensar al hacer, colaborando con otras personas para aprender a través de la experiencia.
Son, por tanto, espacios creativos, de experimentación, en los que se fomenta el interés por la ciencia, la tecnología y el diseño, que se van abriendo hueco en las bibliotecas de todo el mundo, con denominaciones específicas como bibliolabs o bibliomakers. ¿Y por qué en las bibliotecas? Porque en los makerspaces se proporciona tecnología, información y recursos para la construcción de conocimiento y la creación, que son dos de sus objetivos fundamentales. Porque promueven los aprendizajes informales y también la lectura, necesaria para investigar y conocer las experiencias previas que faciliten llevar a cabo los proyectos. Porque son, además, a diferencia de las aulas, espacios comunes y abiertos que facilitan el encuentro de estudiantes de distintos niveles y la colaboración intergeneracional.
Espacio de creación

- ¿Tradicional? Los laboratorios de informática son aburridos.
Makerspace en un centro escolar
Por supuesto, tanto las actividades como la tecnología que se proporcione han de adaptarse a las edades del alumnado, como refleja claramente este vídeo.
Proyectos de robótica
Los kits de robótica y electrónica básica encajan perfectamente con el espíritu del movimiento maker y permiten aprender experimentando y jugando.
Impresión en 3D
La democratización del acceso a medios como las impresoras 3D facilita la creación de prototipos.
Nuevas tecnologías...

En los talleres creativos tienen cabida actividades de experimentación con medios informáticos y electrónicos...
... o no tan nuevas

... pero también las manualidades, que se pueden llevar a cabo con medios más modestos.
Lo importante

En este taller de creación de chapas se apuesta por algo intermedio. Todo es válido, lo importante es fomentar la creatividad.
Desde los siguientes enlaces se puede acceder a recursos que ofrecen orientaciones para la puesta en marcha de talleres creativos y a experiencias realizadas en bibliotecas escolares.
- Cómo hacer un espacio maker: guía didáctica que explica detalladamente qué son los makerspaces, qué tipo de materiales deben proporcionar y cuáles son los pasos para montar uno. Se trata de un modelo flexible que puede adaptarse a las bibliotecas escolares, ya que "lo importante es la metodología y fomentar la cultura de experimentación".
- Del aula al laboratorio: buenas prácticas para la creación de laboratorios en el ámbito educativo: documento publicado por Tabakalera, pionera en la introducción de elementos de makerspace en la biblioteca, con orientaciones para la construcción de espacios para el aprendizaje y la creación, las formas de trabajar, los cambios organizativos y metodológicos necesarios.
- Escornabots en la biblioteca escolar: experiencias del proyecto de robótica en la biblioteca impulsado por la Xunta de Galicia. Aunque el texto está en gallego, incluye numerosos vídeos, muy ilustrativos, que permiten el acercamiento al desarrollo de las distintas actividades.