Definiciones

¿Qué se supone debemos enseñar a nuestro alumnado? Las definiciones de educación financiera tienden a ser grandilocuentes, ambiciosas, y posiblemente intimidantes para docentes no especializados en temas económico-financieros. Vamos intentar sacar los puntos esenciales de algunas de estas definiciones.

logo OCDESiguiendo las definiciones de la OCDE,

“la educación financiera se refiere a la enseñanza de conocimientos, habilidades, comportamientos, valores y aptitudes que permitan a las personas tomar decisiones financieras informadas y sensatas en su vida diaria.”

El resultado objetivo de la educación financiera se suele denominar “competencia financiera” o “capacidad financiera”.

 

Logo PISAEn particular, en PISA,

“...la competencia financiera hace referencia al conocimiento y comprensión de los conceptos y riesgos financieros, y a las destrezas, motivación y confianza para aplicar dicho conocimiento y comprensión con el fin de tomar decisiones eficaces en distintos contextos financieros, mejorar el bienestar financiero de los individuos y la sociedad, y permitir la participación activa en la vida económica.”

PISA ofrece otra definición resumida de la competencia financiera como

“...conjunto de conocimientos y destrezas asociadas al desarrollo de la capacidad para dar respuesta a las demandas financieras de la vida diaria en la sociedad actual. “

En los Estados Unidos, The President's Advisory Council on Financial Literacy define la capacidad financiera como

“la capacidad de utilizar conocimientos y destrezas en la gestión eficaz de recursos financieros, para lograr el bienestar financiero a lo largo de la vida.”

Por último, la Commission for Financial Literacy and Retirement Income de Nueva Zelanda, país con larga tradición de implementar la educación financiera en el aula, define la capacidad financiera como

“la capacidad de hacer juicios informados y tomar decisiones eficaces en relación con el uso y manejo de dinero.”

Destacamos dos aspectos comunes e importantes de todas estas definiciones:

Chico adolescente con billete de 200 euros

  1. La educación financiera tiene carácter eminentemente práctico. Las definiciones hacen referencia a la toma de decisiones en la vida diaria y al logro del bienestar individual. No se trata de enseñar teorías complicadas, ni aprender de memoria vocabulario técnico. Aunque la mejora de la cultura financiera de los ciudadanos tiene un impacto positivo en la sociedad, aquí nos interesa la relación del individuo con su dinero. La educación financiera tendrá una aplicación práctica durante toda la vida de tus alumnos.
  2. No se trata simplemente de conocimientos. Como educadores, sabemos que una competencia, más que la acumulación de conocimientos, es el conjunto de conocimientos, destrezas, estrategias, actitudes, motivación y valores, que los individuos construyen a lo largo de la vida. Esto es importante, ya que la educación financiera ha de incluir el fomento de actitudes y hábitos relacionados con el ahorro y la responsabilidad financiera, y el cambio o reforzamiento de comportamientos. De poco sirve que los alumnos saquen puntuaciones altas en las evaluaciones de PISA o de cualquier otro examen si no ponen en práctica estos conocimientos para mejorar su situación económica personal, ahora y en el futuro.

“Educación financiera no es enseñar a la gente conceptos que desconocen, sino enseñar a los adultos hábitos y comportamientos que actualmente no practican y enseñar a los niños hábitos y comportamientos que deberían practicar.”

Foundation for Teaching Personal Financial Education