La LOMLOE y el nuevo currículo

2. La LOMLOE

2.2. Principios y fines del Sistema Educativo

Enlazando con los objetivos de la LOMLOE, presentados en el apartado anterior, se encuentran los principios y los fines del sistema educativo. Los principios del sistema educativo constituyen la base sobre la que se fundamenta la Ley, la fuente de inspiración y el punto de partida para la elaboración de la acción normativa posterior. Por otro lado, los fines y las metas, que se describen en la Ley, serían las declaraciones fundamentales acerca de lo que se espera que el alumnado alcance en su proceso de desarrollo integral, fomentando con ello la construcción de un mundo y una sociedad mejor.

Principios del sistema educativo:
En el artículo 1 de la Ley Orgánica 2/2006 de 3 de mayo de Educación (LOE), en la nueva redacción dada por la Ley Orgánica de 3/2020 de 29 de diciembre (LOMLOE) en su artículo único, punto 1, se redactan los principios del sistema educativo español, inspirados en los valores de la Constitución en cuanto al respeto, derechos y libertades reconocidos en ella. La gráfica representa de forma breve y esquemática los principios a los que se hace referencia en esta ley:

principios del sistema educativo español

Principios del sistema educativo español. Educagob: Portal del Sistema Educativo Español. Ministerio de Educación y Formación Profesional. 


Los principios que rigen el sistema educativo español, son la clave para alcanzar una mejora en la calidad educativa y una inclusión y equidad de todo el alumnado en el sistema educativo:

  • El primer principio hace referencia al cumplimiento de los derechos de la infancia que, según lo establecido en la Convención sobre los Derechos del niño aprobada por Naciones Unidas en noviembre de 1989, debe ser el principal referente y la inspiración de todas las medidas gubernamentales relacionadas con la infancia, entre las que se encuentra la educación. Se reconocen entre otros, el interés por el menor, su derecho a la educación, a no ser discriminado y a participar en las decisiones que afecten directamente a su persona y al contexto que lo rodea y, por otro, la obligación del Estado de asegurar estos derechos que le son otorgados.
  • El segundo principio hace referencia a la calidad de la educación para todo el alumnado. Según la UNESCO  (1992), se considera calidad en la educación a "la capacidad de proporcionar al alumnado el dominio de códigos culturales básicos, capacidades para la participación democrática y ciudadana y el desarrollo de capacidades y actitudes en una sociedad que desea una vida de bienestar para todos los ciudadanos". Para progresar, por tanto, en la mejora de la calidad educativa, es necesario integrar competencias, eficacia, coherencia e innovación educativa, todo ello enfocado hacia la igualdad efectiva de oportunidades entre hombres y mujeres.
  • El tercero, cuarto y quinto principios hacen referencia a varios aspectos: por un lado, a la equidad, que garantiza la igualdad de oportunidades para el pleno desarrollo de la personalidad a través de la educación, la inclusión educativa, la igualdad de derechos y deberes, también entre hombres y mujeres, que ayuden a lograr así una sociedad más justa, superando cualquier discriminación y proporcionando la accesibilidad universal a la educación. Por otro lado, a la educación para la convivencia, el respeto y la prevención y resolución pacífica de conflictos, cuyo desarrollo y resultado acompañará al alumnado a lo largo de toda su vida, en los diferentes ámbitos personal, familiar y social. Asimismo, la gestión adecuada de las emociones, actuar con empatía, ser asertivo y desarrollar habilidades sociales entre otros aspectos, son aprendizajes que se deben fomentar a lo largo del proceso de aprendizaje. Todo ello contribuirá a la mejora en la resolución de conflictos y a la toma de decisiones ante situaciones y retos reales que se pueden plantear en el día a día. Desde las instituciones educativas es relevante promover desde edades tempranas estos valores en el alumnado, así como el pensamiento crítico y  la conciencia ecológica, para favorecer la identificación y la adecuada actuación ante determinadas situaciones a las que se deba enfrentar.
  • Entre el resto de principios, se destacan varios aspectos. Entre ellos, la flexibilidad para adecuar la educación a la diversidad del alumnado, teniendo en cuenta sus aptitudes, intereses o expectativas y atendiendo al conjunto de acciones educativas que se han de tener en cuenta para prevenir y dar respuesta a las necesidades temporales o permanentes del alumnado en su grupo. Se han de tener en cuenta, por tanto, el proceso gradual y continuo de ayuda y asesoramiento al estudiante durante su vida académica, para garantizar su progreso formativo en el centro educativo y contribuir a diseñar un itinerario educativo y profesional en función de sus expectativas profesionales. Para ello, se ha de fomentar el esfuerzo individual y compartido, donde el "motor" que impulsa todo el proceso sea la motivación hacia al aprendizaje, obteniendo como resultado la mejora en los mismos, el reconocimiento familiar y escolar y el espíritu de superación. En este sentido y con el fin de poner en marcha los mecanismos de mejora de la educación, desde la ley se potencia la autonomía a los centros, estableciendo y adecuando las actuaciones organizativas y curriculares necesarias en el marco de las competencias y responsabilidades que corresponden al Estado, a las Comunidades Autónomas a las corporaciones locales y a los centros educativos. Así, la participación de la comunidad educativa en la organización, gobierno y funcionamiento de los centros docentes y la puesta en valor de la función docente, mediante el reconocimiento social del profesorado y el apoyo a su tarea, van a ser aspectos esenciales para la mejora en la educación. 
  • Por su parte, la experimentación, la investigación e innovación educativa, conllevan un conjunto de actividades y estrategias complejas, entre las que existen relaciones dinámicas y que configuran un proceso enmarcado en las funciones del profesorado y en la autonomía que las leyes educativas han ido proporcionando a los centros docentes. Por su parte, en todo sistema educativo, ha de existir una evaluación que contribuya a mejorar la calidad y equidad de la educación, así como reorientar las políticas educativas y a aumentar la transparencia y eficacia del sistema educativo. Es así cómo, a través de la cooperación, colaboración y coordinación con otras administraciones, se permite el intercambio de información y se promueven proyectos de buenas prácticas, para afrontar los retos del sistema educativo y aprovechar las oportunidades para fortalecerse mutuamente.
Fines del sistema educativo:

Basándonos en las modificaciones incluidas en el artículo único de la LOMLOE, referidas al artículo 2, los fines del sistema educativo se concluyen así en su nueva redacción:

fines educativos

Fines del sistema educativo español. Educagob: Portal del Sistema Educativo Español. Ministerio de Educación y Formación Profesional.

Entre los fines educativos que se proponen en la Ley, descritas en el gráfico anterior, se persigue que el alumnado adquiera una serie de capacidades y estrategias que les posibilite progresar en los distintos ámbitos del desarrollo y regularse en el proceso de aprendizaje. En este proceso de aprendizaje, se ha de tener en cuenta como pilar esencial, el respeto hacia los principios democráticos de convivencia, la adquisición de valores en el alumnado que fomenten e impulsen el respeto hacia los seres vivos y el medio ambiente, así como los derechos y libertades fundamentales en el ejercicio de la tolerancia hacia la pluralidad lingüística y cultural. Se promueve además en el alumnado, la adquisición de conocimientos y hábitos de trabajo, que les permita ejercitar actividades profesionales que les prepare para su inserción en la vida económica, social y cultural, de forma activa. En este sentido y teniendo en cuenta el avance vertiginoso de las sociedad actual en el aspecto digital, se intenta fomentar desde la Ley, el capacitar y garantizar la inserción del alumnado en la sociedad digital de forma progresiva.

Para que la educación pueda cumplir el papel que le corresponde en la sociedad, necesita responder al "para qué", a través de los fines del sistema educativo. Estos son la referencia medular del conjunto de directrices u orientaciones de carácter general que guían las actuaciones y fundamentan la estructura del sistema educativo, respondiendo a las prioridades, objetivos educativos y estrategias que han sido definidos desde las políticas educativas nacionales, en relación a un modelo de sociedad.