Nuevamente la recomendación de 2018 amplía la definición con varios aspectos. Así las competencias clave se precisan también para el éxito en la vida en sociedades pacíficas, desarrollar un modo de vida saludable y un estilo de vida sostenible.
Todas ellas se desarrollan con una perspectiva de aprendizaje permanente y mediante el aprendizaje formal, no formal e informal en todos los contextos (familiar, centro educativo, lugar de trabajo, entorno y otras comunidades).
¡Y todas ellas son igualmente importantes!