1.1. Perspectiva diacrónica o histórica

1.1.1. Historia del Pueblo Gitano. La historia de una marginación silenciada

4. El pueblo gitano en Europa.

Finales del siglo XIV es el momento en el que la mayor parte de la emigración romaní llega a Europa, concretamente a las tierras de Valaquia y Moldavia, donde los gitanos se convierten en bienes que pueden venderse, cambiarse o regalarse. Un sometimiento que les obligaba a trabajar en las tierras de los señores como campesinos y herreros, como siervos de los monasterios e incluso como guerreros forzosos. Esta situación de esclavitud, unida a la presión del ejército otomano, provocaría el éxodo masivo por toda Europa. A lo largo del siglo XV se encuentran toda una serie de menciones de su presencia en Europa central y occidental. En estos primeros viajes, sólo su asimilación al Cristianismo y la condición de peregrinos les facilitaron alguna pequeña protección.

– FSG


Dependiendo de las costumbres, la zona geográfica que ocuparon y la variante dialectal de la propia lengua hablada por los gitanos, se van configurando los grandes grupos gitanos que han sobrevivido hasta hoy en día: kalé, lovari, sinti, kalderash y manouche. . 

– página web de la Unión Romaní


4.1. "Edad de oro"

Diversos historiadores consideran el siglo XV como la edad de oro del pueblo gitano en Europa. Iban de ciudad en ciudad, y aunque es cierto que a menudo eran expulsados, hasta el siglo XVI no se desatará una ola de persecución contra ellos, “solo comparable al antijudaísmo de los europeos”. En el siglo XV los estereotipos antigitanos aún no estaban enraizados, y entre cierto recelo y fascinación la cultura gitana se dispersó por el continente y fue mezclándose con las culturas y los idiomas locales.

La imagen colectiva que se tenía de los gitanos en estos primeros tiempos era la de pequeños grupos de población errante con su propia lengua, vestimenta, costumbres, música y bailes, acompañados de caballos y galgos y comandados por un jefe llamado Conde o Duque que administraba justicia dentro del grupo. Físicamente se les describe y representa con tez oscura, pelo largo, pendientes y coloridos ropajes. Se ganan la vida con la mendicidad y la adivinación, dedicándose también al chalaneo, el trabajo de los metales, la curación, la música y la danza.

– pág. Web de la FSG


El atractivo de lo desconocido.- Los primeros romà que llegan a Europa deambulan de país en país relatando las más extraordinarias y misteriosas historias sobre su origen. Los habitantes de los países a los que llegan les escuchan embelesados, pero cuando desaparece la magia por lo desconocido los empiezan a ver como invasores, cuando no como vagabundos, delincuentes o ateos. A partir de ahí, la historia de los romà está sembrada de persecuciones, castigos e incomprensión.

– pág. Web de la Unión Romaní


4.2. Inicio y consolidación de las persecuciones sistemáticas

Su presencia progresivamente se fue convirtiendo en un desafío tanto para los poderes políticos y religiosos establecidos y su afán homogeneizador como para la población sedentaria. Esta percepción amable y pintoresca pronto empieza a tornarse en rechazo. En la segunda mitad del siglo XV y a lo largo del XVI se generaliza una actitud de persecución hacia los gitanos. Su estilo de vida nómada chocará frontalmente con los esquemas morales de las sociedades europeas y se les comenzará a acusar de todo tipo de delitos e incluso prácticas de hechicería (pág. Web de la FSG). Por lo que a partir de finales del siglo XV se sucederán en toda Europa pragmáticas, leyes y decretos contra la población gitana y su modo de vida. Por ejemplo:

  • En 1661 en Sajonia impusieron pena de muerte para los roma que estuvieran en su territorio y se promovieron cacerías para exterminarlos.
  • En 1721, el emperador Carlos VI de Habsburgo ordenó exterminar a los roma, los hombres fueron ejecutados y las mujeres y los niños les cortaban una oreja antes de sacarlos del país (Liégeois, 1987).
4.3. Esclavos durante cuatro siglos

Las zonas de Valaquia y Moldavia mantenían códigos legales que gobernaban a los esclavos gitanos como 4 siglos antes. Pertenecían a amos particulares que podían darlos muerte con impunidad y aplicar terribles castigos. No fue hasta 1855 que el príncipe de Moldavia abolió la esclavitud. Valaquia no tardó en imitarlo y tras la guerra de Crimea se elaboró una nueva constitución para los principados que se habían convertido en Rumanía, donde los gitanos, en principio, tenían derecho a la nacionalidad.

– ib.


anuncios venta de esclavos
Anuncios de una venta de esclavos gitanos el 8 de mayo de 1852: 18 hombres, 10 niños, 7 mujeres y 3 niñas, "in conditie fina" (en buena condición)

4.4. Continúan las persecuciones y las migraciones

A lo largo de todo el siglo XVIII y mediados de siglo XIX se produjeron diversos movimientos hacia el oeste de población gitana, primero huyendo de la esclavitud y después aprovechando su abolición en Moldavia y  Valaquia en 1860 y también como consecuencia del recrudecimiento de la persecución en la Europa occidental (especialmente en Francia y Alemania).

Algunos gitanos emigraron a América Latina, aunque se desconoce su número. Según Koen Peeters: salieron de Valaquia en algún momento del siglo XVIII o XIX, huyendo de la esclavitud en esta región o liberados con su abolición. Será especialmente después de la independencia de Serbia en 1830 cuando grandes cantidades de gitanos emigren a América Latina huyendo de la esclavitud de Rumania, y, a partir del año 1856, empujados por su abolición. Su salida de Serbia en el siglo XIX puede deberse “a una presión de asimilación” (por “una serie de leyes dirigidas a abolir el nomadismo” y “una campaña de conversión a la religión ortodoxa”); “en segundo lugar, con una posible nueva viabilidad de sus ocupaciones de elección, rentables en las nuevas localidades formadas por los inmigrantes, ya sea por una necesidad previa a la migración o derivada de ella misma”; y, en tercer lugar, “por motivos comunes a otros emigrantes de los Balcanes en esta época, entre otros, la pauperización de la región, la imagen de fortuna del Nuevo Mundo, leyes que favorecieron la inmigración y nuevas posibilidades de transporte. (Peeters Grietens, 2004).

La última mitad del siglo XIX vio cómo los gitanos de los Balcanes y Hungría se marchaban en todas direcciones. A este factor se une la profunda transformación de Europa occidental. Es el siglo de la Revolución Industrial, el paso de una sociedad rural a una sociedad urbana, abriéndose nuevas oportunidades económicas que impulsarán este nuevo ‘viaje’ de los gitanos.

– pág. Web de la FSG


4.5. Ideas pseudocientíficas racistas decimonónicas y persecuciones en la primera mitad del siglo XX

Como es sabido, a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX y primera parte del siglo XX se fueron fraguando teorías pseudocientíficas que se usaron como nueva justificación o coartada del colonialismo e imperialismo de los países europeos y para cargar contra sus propias minorías étnicas. Estas teorías pretendían basarse en análisis craneométricos y de otras medidas y rasgos corporales (como faciales y color de la piel) e incluso antropológicos para establecer una jerarquización racial evolutiva de los seres humanos, en la que el hombre blanco o de “raza caucásica” ocuparía la cúspide de la pirámide, en cuanto ser más evolucionado, frente al resto de las razas, descritos como inferiores biológicamente, como seres semi-humanos o quasi-humanos, más bestializados, no tan humanos como el hombre blanco o caucásico... Este supuesto argumento científico daría derecho a la raza blanca o caucásica a dirigir el mundo y dominar al resto de las "razas", al ser los más capaces genéticamente para ello. Esto se presentaba como el resultado lógico de una verdad demostrada por las ciencias naturales más avanzadas del periodo, como algo confirmado científicamente.

La eugenesia había tomado carta de uso común, tanto en su vertiente positiva como negativa […] como la ciencia que trata de todas las influencias posibles para mejorar las cualidades innatas de una raza. […] [Se dictaron] leyes en materia eugenésica […] en países como Estados Unidos (1907) y Noruega (1915) […] Se trataba de mejorar la raza mediante la unión de los más sanos e inteligentes, a la vez que se impedía procrear a seres enfermos o criminales, alegando el alto coste social y económico que suponía su mantenimiento.

– A. E. Rizo López (2005)


Durante las primeras décadas del siglo XX en numerosos lugares de todo el continente se pondrán trabas a la movilidad transfronteriza de los gitanos. Haciéndose eco del racismo biologicista pretendidamente científico, en 1912 en Francia se implantó “el carnet antropométrico de nómadas” (en el que se incluían las huellas digitales y dos fotografías y se consignaba el estado civil, la profesión y los rasgos físicos).

Tras la Primera Guerra Mundial, los ‘gitanos’ se convirtieron en uno de los segmentos de población más controlados en Europa por la policía, al mismo tiempo que penalizados jurídicamente por seres asociales. Por sus ventajas particulares —aunque no exclusivas— para la identificación y censo de ‘gitanos’, el uso de fichas antropométricas se generalizaría facilitando la labor de la International Criminal Police Commission (ICPC o Interpol) creada en 1923. La identificación era, además, imprescindible para la reeducación forzosa de «gitanos», especialmente severa en la Europa del Este a partir de 1927. Estos años no solo resultaron claves en la transformación general que se operó en el campo de la gubernamentalidad/es en Europa, sino también en su configuración más específicamente ligada a la racialización positivista del «gitano». En ella se daría la mano su patologización bioantropológica con la tipificación penal de sus supuestas conductas antisociales. La consolidación de las explicaciones raciales para determinados delitos como la vagancia o el robo junto a la aplicación de medidas de seguridad crearían las condiciones para tender […] la «trampa mortal» de la construcción policial de la etnicidad del grupo.

– García Sanz, C. (2018)


A medida que se acerca la Segunda Guerra Mundial, la persecución (alentada por las nuevas teorías racistas eugenésicas) se hizo más dura. El gobierno prusiano decidió acabar con la ‘molestia gitana’ mediante un acuerdo internacional diseñado para erradicar su forma de vida. En Baviera se elaboró en 1905 un ‘Libro gitano’, con un censo inicial de 3000 personas, que pronto aumentaría con la colaboración de otros Estados germanos. Así mismo, Baviera autorizó el castigo a trabajos forzados a todo gitano que no pudiera demostrar tener un trabajo estable, y la República de Weimar extendió esta medida a toda Alemania. Los censos de gitanos se multiplicaron en toda Europa (Francia, Inglaterra, Suiza…)

4.6. Samudaripen o Porrajmos: "la gran catástrofe"

Los albores del siglo XX fueron una época floreciente para el determinismo biológico y las teorías sobre la pureza de la raza, que tuvieron un fuerte impacto filosófico y político en Europa; especialmente en Alemania. El nuevo enfoque cristalizó en las Leyes de Protección de la Sangre y el Honor de Nuremberg. Establecían el marco de elección para la plena nacionalidad y comenzaban a tratar a los gitanos, junto con los judíos, como una peligrosa raza extranjera cuya sangre era una amenaza mortal para la pureza racial alemana. Se calcula que más de medio millón de gitanos perecieron en el Holocausto nazi. A este atroz episodio de la historia, el pueblo gitano lo conoce como Porrajmos, ‘La gran catástrofe'.

– FSG


El nazismo –además de con judíos, homosexuales y opositores e ‘indeseables’ en general- se cebó con crueldad en los gitanos. Tras unos momentos de duda, en los que se estuvo a punto de clasificar a los gitanos dentro de la raza aria, Himmler, jefe de las SS e impulsor del holocausto, ordenó que se actuara contra los gitanos. Para ello, el Centro de Investigación para Higiene Racial y Biología Poblacional del Reich se sirvió de los anteriores censos. Se llevó a cabo detención de familias gitanas por todo el territorio dominado por los nazis, con su consiguiente internamiento y finalmente su ejecución en masa (como es sabido, Himmler, para evitar gastar munición, ordenó la creación de las cámaras de gas). Este genocidio gitano se conoce con el nombre de Samudaripen o Porrajmos: “la gran catástrofe” o “la devoración”.

Se desconoce el número exacto de víctimas. Las estimaciones van desde 50.000 hasta 1.500.000… Sólo en Auschwitz-Birkenau murieron más de 20.000 gitanos. Y en un solo día, el 3 de agosto de 1944, los últimos 2.897 habitantes de las barracas gitanas de Auschwitz (hombres, mujeres y niños) “dejaron para siempre de cantar y de darse ánimo".

Cabe destacar, finalmente, que en los Juicios de Núremberg no fue convocado a declarar ningún gitano. Como señala el investigador de Derecho penal internacional Miguel Ángel Rodríguez Arias:

Lo que sí supondrían […] los juicios de Núremberg es la definitiva consagración de toda una nueva aspiración de justicia y humanidad de la entera especie humana, la definitiva consagración de toda una nueva rama jurídica, el Derecho penal internacional, nacido para quedarse ya para siempre entre nosotros. […] Hoy, que tanto se hablará de Núremberg y se recordará su indudable importancia, y sus grandes luces, conviene recordar, también sus grandes sombras. Alguna de las cuales, como su carácter no solo potencialmente selectivo sino propiamente "discriminatorio", quedó flagrantemente de manifiesto desde los propios juicios. […]

En Núremberg, entre tales ‘víctimas de tercera’, - incluso habiendo sido víctimas de los nazis y no de los aliados -, quedó desterrado el pueblo gitano.

Y así ninguna justicia merecieron los 250 niños gitanos con los que en las primeras semanas de 1940 los nazis probaron en el campo de Buchenwald la mortandad del nuevo gas Zyclon B, para pasar a ser masivamente empleado después en las cámaras de gas.

Ni tampoco la merecieron los más de mil gitanos alemanes que, en Junio de 1938, fueron deportados a los campos de concentración de Buchenwald, Dachau, Sachsenhausen y Lichtenburg; o los varios miles más gitanos alemanes y austríacos que siguieron siendo deportados después a esos y otros campos como Mauthausen y Ravensbrück.

Ni tampoco merecieron justicia los más de 4.000 gitanos pasados por las cámaras de gas de Auschwitz en una sola noche, el 1 de agosto de 1944, en la llamada 'Zigeunernacht' o ‘noche de los gitanos’.

Nada de ello merecía ser debidamente investigador en Núremberg al parecer; ni un solo superviviente gitano merecía ser llamado a declarar, ¿cómo es posible?, ¿por qué?, ¿ese habría de ser el planteamiento de la nueva justicia internacional?

– M. A. Rodríguez Arias (2017)

niña gitana
Settela Steinbach, niña gitana sinti holandesa de 9 años que se asoma asustada al exterir del vagón que la llevará a Aushchwitz, instantes antes de que un soldado selle la puerta. Fuente: Es un fragmento de una breve película que fue obligado a filmar Rudolf Beslauer, un prisionero judío de Westerbork, el campo de concentración de donde partía el tren.
Niños romaníes internados en el campo de concentración
Niños romaníes internados en el campo de concentración de Lety. Fuente: Academia de las Ciencias de la Rep. Checa.
grupo de romaníes prisioneros
Un grupo de romaníes prisioneros, en el campo de concentración de Belzec. 
4.7. Políticas antigitanas después de la Segunda Guerra Mundial

La condena del racismo como ideología pública en 1945 no terminó con las políticas de asimilación coactiva sobre el ‘gitano’ en Europa

– García Sanz (2018)


El fin de la segunda guerra mundial no supuso ni mucho menos una mejora constante en la vida de todos los gitanos europeos

Rizo López (2005)


  1. Al oeste del “telón de acero”:
    • La regulación del ejercicio de actividades ambulantes y del régimen administrativo y no penal aplicable a las personas sin domicilio fijo continuó a través de determinadas disposiciones restrictivas. La ley francesa de 3 de enero 1969 estipulaba que los carnets de circulación de determinados nómadas debían ser visados por la policía con mayor frecuencia que otros. En este mismo apartado, podría considerarse la legislación holandesa (llamada ‘ley de carromatos’) de 1968 o la Caravan Sites Act británica del mismo año (García Sanz, 2018). También en Suiza se establecieron severas medidas contra los nómadas, incluido el arrancar de sus familias a los “niños del camino” [La escritora de la minoría yeniche Mariella Mehr fue víctima de este programa y vivió en dieciséis orfanatos y tres reformatorios cuando era niña. En su novela “Kinder der Landstrasse: Ein Hilfswerk, ein Theatre und die Folgen” (Niños del Camino: Una caridad, un teatro y las consecuencias) (1987) rememora lo que fue su infancia apartada de su familia. La película italiana “Donde caen las sombras”, de 2017, la trasladó a la pantalla.

    • A lo largo del último siglo, Suecia esterilizó, persiguió, arrebató niños y prohibió la entrada en el país a los gitanos y las personas de esa minoría étnica fueron tratadas durante décadas por el Estado como ‘incapacitados sociales’. Estos anuncios no los ha hecho una ONG militante. Es el relato del Gobierno conservador sueco. […] El ministro de Integración, Erik Ullenhag, ha definido esas décadas de impunidad y racismo de Estado como ‘un periodo oscuro y vergonzoso de la historia sueca’. […] Describían a los gitanos como ‘grupos indeseables para la sociedad’ y como ‘una carga’. […] Recuerda que los niños eran segregados en aulas especiales y que se les impedía acceder a los servicios sociales. ‘La idea era hacerles la vida imposible para que se fueran del país'. (Carbajosa y Mora, 2014).

  2. En el Este:
    • En muchos países comunistas, con el fin de convertir a los “gitanos” en “camaradas productivos”, se recurrió a políticas de asentamiento e internamiento en campos de trabajo, al mismo tiempo que se mantenía una posición ambigua en el reconocimiento de su condición como nacionales (García Sanz, 2018). Los gitanos sufrieron políticas de asimilación y restricciones a su libertad cultural.

    • El Estado búlgaro los consideró "ciudadanos de origen no búlgaro" y prohibió el uso del idioma romaní y la representación de música romaní en actos públicos (ib.)

    • En 1948, Checoslovaquia revocó su estatus nacional (ib.)

    • En 1965 se realizaron deportaciones de gitanos eslovacos, con el objeto de mermar su población gitana al dispersarla por áreas checas.

    • También decenas de miles de gitanos de Hungría y Rumanía fueron reasentados en regiones fronterizas de Moravia, y se prohibió su estilo de vida nómada.

    • En Checoslovaquia se les calificó de ‘estrato social degradado’ y se les prohibía asociarse. Desde 1972 mujeres romaníes fueron sometidas a esterilizaciones como parte de la política del Estado para reducir su crecimiento demográfico y dentro de una beligerancia hacia ‘gitanos y vagabundos’. Esta política se puso en práctica en ocasiones mediante incentivos financieros y amenazas de retirada de subsidios sociales y en otras se les obligó a las mujeres o no se les informó de la esterilización de que eran objeto. 

    • Los regímenes comunistas de Albania, Bulgaria Hungría o Rumanía entre otros, crearon orfanatos y escuelas para deficientes a las que se enviaba a los niños gitanos, restándoles de esta forma oportunidades para ocupar lugares prominentes en sus sociedades ( Rizo López,  2005).

4.8. Nuevas migraciones y nuevas restricciones y antigitanismo

En la Europa occidental, a principios de los años 60, algunos países comenzaron a cubrir sus necesidades de mano de obra con trabajadores extranjeros. Un número considerable de ellos eran gitanos. La mayor parte de la emigración les llevó hacia Alemania, Italia, Austria, Francia y los Países Bajos y la mayoría fueron empleados en fábricas, en la construcción o como temporeros.

– pág. Web FSG


Con la caída del Muro de Berlín en 1989 y el derribo de los gobiernos comunistas de la Europa Central y del Este y la subsiguiente crisis económica y, especialmente, por causa de la Guerra de Yugoslavia (1991-2001), comienza una nueva diáspora gitana, del este al oeste.

Se estima que entre 200.000 y 300.000 gitanos se han desplazado del este al oeste de Europa a partir de 1960. Al deteriorarse la situación política en los Balcanes, unos 40.000 gitanos llegaron a  Italia y otros 30.000 a Austria.

El estallido de la guerra en la antigua Yugoslavia (1991-2001) supuso la masacre y deportación de miles de gitanos. Los gitanos fueron víctimas de la “limpieza étnica” por parte de los distintos pueblos resultantes, con el pretexto de que habían ayudado al enemigo. Miles de gitanos se vieron obligados a malvivir en campos de refugiados o a emigrar al oeste, encontrándose en muchos casos rechazos tanto por la población como por los gobiernos, como ha ocurrido en Gran Bretaña, Alemania, Italia o Francia. 

Con la caída del régimen comunista en Checoslovaquia y la aparición de dos nuevas repúblicas, la suerte de los gitanos no ha mejorado: a muchos se les ha denegado la ciudadanía checa a pesar de ser de familias oriundas de esa tierra desde hace siglos; han seguido sufriendo ataques por parte de grupos racistas; y se han dado casos de segregación como el muro que se levantó en Usti nad Labem, para separar un barrio de población gitana del resto de la ciudad.

En Gran Bretaña, la abolición de la ley de Campamentos ocurrida en 1994, dejó a miles de gitanos sin hogar, lo que les ha hecho más vulnerables al rechazo de la población británica y más aún en la actualidad con la oleada de inmigrantes gitanos que proceden de los países de la Europa del Este, tras el conflicto en los Balcanes.

En 1999 “Alemania concedió grandes cantidades de dinero a Rumanía con objeto de que acogiera de nuevo a los gitanos que se estaban asentando en territorio germano ).

Rizo López, A.E., 2005


La crisis económica sufrida a partir de 2008 ha generado también una intensa ruta migratoria desde algunos países ex comunistas hoy pertenecientes a la UE, especialmente Rumanía y Bulgaria, a Europa occidental.

En las últimas décadas se han producido disturbios antigitanos en varios países europeos y se han endurecido las leyes hacia los gitanos inmigrantes en Italia, Francia y Gran Bretaña. En 1999, el subsecretario de estado británico, Mike O’Brien, declaró que no podía otorgarse a los gitanos el derecho de asilo político pues éste es sólo para los perseguidos, no para los pobres (Rizo López, A. E., 2005).

Tras la integración de Rumanía y Bulgaria en 2007, la UE […] heredaba la situación en la que se encontraban los varios millones de gitanos de esos dos países. Una situación execrable porque, en ambos casos, los gitanos son tratados como parias. […] Ciudadanos europeos, numerosos gitanos han buscado fortuna en los países más ricos de la UE. Esto ha provocado la reaparición de poblados marginales a las puertas de las grandes ciudades […] Francia no es el único país que se equivoca al expulsar a los gitanos. Otros países, como Alemania, Suecia e Italia, por ejemplo, han hecho lo mismo.

– Le Monde, Paris, 11-9-2010


Sarkozy ha mediatizado la deportación, y ha organizado una dura polémica con Bruselas sobre gitanos, para intentar hacer olvidar la destrucción de empleo, el recorte de pensiones y las subidas de impuestos que se están dando en Francia.[...] Sarkozy necesita urgentemente una cortina de humo.

– Público, 19-8-2010)


Lo que está teniendo lugar son deportaciones de grupos y familias, no de individuos delincuentes [...] [lo cual indica que se está manejando] el descontento de las clases populares, avivado por la crisis generalizada, para desviar el foco contra un chivo expiatorio, una política bien barata que no consiste en redistribuir la riqueza, emancipar a las personas y pensar en otros modelos sociales más justos, sino en consolidar una sociedad estratificada e injusta, arbitraria y abusiva, a nivel local y globlal.

– Grup de Recerca EMIGRA de la Universidad Autónoma de Barcelona


Todos ellos son ejemplos de que persisten viejas formas de discriminación y de antigitanismo, y que las crisis económicas y migratorias parecen agudizarlas.

4.9. Asociacionismo gitano y políticas europeas de protección a las minorías

El 8 de abril de 1971 se celebró el Primer Congreso Mundial romaní/gitano, en Londres. En él se fundó la Unión Romaní internacional y se instituyó la bandera y el himno gitano. La bandera es verde y azul, simbolizando el cielo y el campo, con una rueda de carro roja en el centro, que simboliza el camino desde la India y la libertad. El himno gitano, Gelem, gelem (Anduve, anduve), fue compuesto por Jarko Jovanovic y recuerda a los gitanos y gitanas víctimas del nazismo. También se reconoció la importancia del papel que juega el romanó, como característica distintiva de la gitanidad de cada país y como vínculo entre las comunidades gitanas a nivel internacional. Y, así mismo, se acordó encargar a Donald Kenrick y a Grattan Puxon que escribieran un informe sobre los crímenes cometidos contra los Romá por los nazis (Jiménez, 2018).

Bandera gitana
Bandera gitana

A partir de los años 90 se pone énfasis en la protección de las minorías étnicas en Europa y se comienza a luchar contra la situación de exclusión y discriminación de los gitanos. En 2005 el Parlamento Europeo aprueba una Resolución sobre la situación de los gitanos en la Unión Europea. En ella se señala que el holocausto de la población romaní merece un reconocimiento pleno y que numerosas personas de etnia romaní han sido víctimas de la guerra y de la limpieza étnica, y siguen siendo perseguidas en algunas regiones de la antigua Yugoslavia. Además, se condena la discriminación de los gitanos y reclaman al Consejo, a la Comisión, a los Estados miembros y a los Estados candidatos el reconocimiento del pueblo Rom como una minoría europea, señalando que la Comisión debería tratar los asuntos relacionados con los gitanos a nivel eur.opeo

– pág. Web de la FSG


En el año 2011 el Consejo de Ministros de la UE el Marco de la Unión Europea para las Estrategias Nacionales de Inclusión de la Población Gitana 2012-2020, en el que establece por primera vez unos objetivos, enfoque y ámbitos de trabajo compartidos por todos los Estados miembros de la UE para el desarrollo de medidas y políticas en el ámbito de cada país. Este nuevo Marco Europeo obliga a todos los Estados miembros a elaborar sus propias Estrategias Nacionales, que deben cumplir con objetivos comunes en los cuatro ámbitos prioritarios establecidos: la educación, el empleo, la salud y la vivienda.