3.5. Inclusión de la historia y la cultura del Pueblo Gitano en el currículo y la crítica al racismo

5. ¿Desde qué presupuestos?

5.2 Presupuestos pedagógicos

Nos parece importante introducir la historia y cultura romaní en nuestras aulas, y hacerlo con criterio y corazón, siendo conscientes de que, por encima de todo, tenemos que ayudar a nuestro alumnado a ser mejores personas (críticas con la desigualdad, respetuosas con la diversidad, solidarias, empáticas) y a con-vivir en unos centros escolares y en una sociedad mejores (más justas y convivenciales). Porque incluir al Pueblo Gitano en el currículo no solo es un acto de justicia, sino también una apuesta por una educación más inclusiva. Como señala Amin Maalouf: El futuro no está escrito en ningún sitio; será lo que hagamos de él (op. cit.)

Consideramos que debemos tener en cuenta aspectos pedagógicos, tales como:

  1. El profesorado debe formarse sobre el tema y reflexionar sobre el mismo [3], hacer una elaboración del mismo adaptada a su alumnado, realizar una selección de materiales y dinámicas a trabajar. Se requiere que el profesorado se haga una planificación de la actividad y un uso adecuado del material a usar, como con cualquier otra actividad escolar y cualquier otro material.
    Hacer presente la historia y la cultura del pueblo gitano en el currículum, así como los mecanismos de los prejuicios racistas, no es nada alambicado ni inescrutable; simplemente, como en todo tema importante, hay que prepararlo y trabajarlo con esmero.

  2. Hay que ayudar al alumnado a realizar un análisis crítico de los distintos materiales trabajados.

  3. Hay que aplicar métodos didácticos y de evaluación de dicho tema. Por ejemplo:
    • Lectura individual o por grupos y exposición al grupo grande  y/o debate en el grupo grande en base a algunos ítems, tales como: ¿Tú qué sabes de los gitanos?, ¿Qué conoces de la historia del Pueblo Gitano?, ¿Qué imagen da sobre los gitanos este texto? (analizar los posibles estereotipos o, por el contrario, la visión de igualdad en la diversidad reflejada en el mismo).
    • Realizar un pequeño trabajo sobre la historia del Pueblo Gitano o sobre alguna época concreta de la misma, sobre el romanó, el caló y los préstamos lingüísticos de esos a los otros idiomas hablados en España; etc.
    • Con un programa informático de crear cómics realiza una historieta en la que se combatan los estereotipos racistas y los antigitanismos.

  4. No basta con trabajar los contenidos conceptuales (con transmitir a nuestro alumnado conocimientos sobre la historia, la lengua, etc. gitanas); toda la acción educativa debe ser coherente:
    • Es vital hacer posible que nuestros niños y niñas gitanas sientan la escuela como espacio propio. Para que ninguno se considere excluido, marginado o estigmatizado, extraño o ausente. Y para ello es fundamental que no perciba que una parte constitutiva de su ser (como es el hecho de ser gitano) es contemplada desde el desprecio y el estigma, sino que por el contrario, lo vivencie desde la valoración; es decir, todo nuestro alumnado debe poder asumir con autoestima todas y cada una de sus pertenencias y, a su vez, respetar y valorar positivamente todas las pertenencias de sus compañeros y compañeras.

    • Por lo mismo, es importante valorar el barrio: que el profesor/a se interese y conozca el barrio y las circunstancias y culturas de las familias de su alumnado y, en la medida de lo posible, haga presente en su acción educativa éstas realidades y le puedan servir como ejemplificación de sus actividades y propicie la participación de los padres de su alumnado en la vida del centro y aula, a la vez que forma al alumnado para que conozca otras realidades sociales.

    • Hablar de la historia y de la desigualdad pasada y presente exige ser consecuentes y no quedarnos solo en esos relatos, que están bien y es necesario ponerlos sobre la mesa, pero que no puede hacernos olvidar que es preciso, sobre todo, implicarnos en la consecución de la mayor inclusión y equidad posible desde nuestra acción educativa. Evitar el que realizar una actividad sobre la historia y cultura del P. G. se convierta en una excusa o justificación para no hacer nada más, constituyéndose así en una pantalla o justificación para el no cuestionamiento de las relaciones desiguales de fondo y de la segregación y la sobrerrepresentación actual del fracaso escolar del alumnado gitano. La diversidad conlleva enriquecimiento… si hay convivencia en un plano de igualdad (lo contrario es colonialismo, paternalismo, turisteo, balconeo y doble lenguaje).

    • Es fundamental el generar unas actitudes y un estilo relacional basados en los valores humanos, el respeto y la mutua colaboración. Consecuentemente, las metodologías deberán fomentar la investigación y la exploración, la participación, con agrupamientos que permitan el trabajo en equipo y la relación. Tan necesario e importante como el conocimiento de la historia y la cultura gitanas es trabajar conjuntamente y el formar a nuestro alumnado en análisis, vivencias y criterios éticos claros  contra el estereotipo, el prejuicio, la discriminación y el racismo en general y el antigitanismo en particular. La base es el respeto y la valorización a todas las culturas y a/de todas y cada una de las personas, y así habrá que abordarlo como actitud cotidiana. Por eso, resulta fundamental el trabajo colaborativo entre alumnado gitano y no gitano y que no exista segregación escolar (ni externa o inter-centros ni interna –con distintos itinerarios y mecanismos de clasificación dentro de un mismo centro-).

[3] Consideramos necesario que el profesorado cuente con la mejor formación inicial y permanente (fundamentalmente, a través de Centros de Formación del Profesorado) en relación a la historia y cultura del Pueblo Gitano y a la educación intercultural y antirracista.